Había una vez, un maestro bueno al que le querían todos sus alumnos...
Maestro Carlos, desde nuestro blog, los niños y las niñas de 2º B y su seño te damos las gracias por todos tus cuentos, tus canciones y tu generosa colaboración. Echaremos de menos que aparezcas por nuestra puerta cuando menos lo esperamos cual caja de sorpresas llena de diversión y de enseñanzas.
Sin embargo, sabemos que seguiremos viéndote cuando nos visites y deseamos que la nueva etapa que comienzas esté llena de buenas y gratas experiencias que te hagan inmensamente feliz, al igual que lo has sido en la escuela.
Siempre recordaremos tus regalos, pero para nosotros hay una canción especial que irremediablemente nos hará sentir cerca del MAESTRO Carlos. La dejamos aquí para poder disfrutarla y cantarla.
Gracias por dejarme participar en esa clase que está llena de vida y de ilusión.Eres una "seño" paciente y motivadora. Un verdadero regalo para el Centro. Siempre me sentí bien allí donde aprendí de ti y de tus niños que siempre hay un momento para aprender divirtiéndote.
ResponderEliminarGracias,nuevamente, por todo.
Gracias a ti, siempre, MAESTRO.
EliminarMucha suerte en su nueva etapa.y mil gracias por su paciencia y por enseñar a mis niños tanto como le ha enseñado.
ResponderEliminarGracias Maestro Carlos.
Soy Francisco. Profe Carlos as sido muy buen en estos dos años que me as enseññado las desenas y unidades y me encantan tus cansiones y tus cuentos sobre todo el de Mariaiaia.
ResponderEliminarSeño María José y profe Carlos, como habréis visto con Francisco aún queda trabajo por hacer.... No he querido corregir el comentario porque ha querido hacerlo él y mandarle ese mensaje a Carlos.
ResponderEliminarCarlos, gracias por todo. Ahora serán otras personas las que disfrutarán de tu compañía y tu dedicación pero sabes que tienes una cita ineludible con las niñas y niños de sexto A, así que... ¡hasta luego!
Gracias Francisco, niño curioso donde los haya.
ResponderEliminarTu sonrisa, tus frases y ocurrencias valen un mundo.
Eres un sol. Cuida a tu seño, vale un montón de montones.Cuida a tu hermana vale una montaña. Cuida a tu mamá vale una cordillera.
Gracias Carmen, por tu sensibilidad.Por tu comentario. No hay cosa más bonita que nos ayuden a enseñar.